Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, opinó que, en sus aseveraciones de ayer, no debió decir mezquinos a sus oponentes, y a quienes lo agreden tratando de involucrarlo en el fallecimiento de la gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso y su esposo, el senador Rafael Moreno Valle.
Afirmó hoy en su conferencia matutina: “Entiendo que no les haya gustado lo que les dije a los que promueven el odio, a lo mejor no debí utilizar la palabra mezquino que es pobreza, miseria, a lo mejor debí decir que son tiempos desafortunadamente de canallas”.
Invitó a “los conservadores” a que actúen de forma diferente, que no hagan guerra sucia, que jueguen distinto.
Sin embargo, se dio a la tarea de reafirmar el compromiso para realizar una indagación sobre la muerte de los servidores públicos y resaltó que especialistas de Canadá tendrán participación en la elaboración de un dictamen sobre el accidente en el que perdieron la vida el lunes pasado.
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